Veo las primeras imágenes de la plataforma Android de Google y por alguna razón me parece inevitable pensar en el iPhone. ¿Te la han vuelto a jugar Jobs? Tras regalar varios prototipos de los primeros Macintosh a Microsoft para que pudieran sablear su interfaz de usuario a mediados de los 80 y sacar así la primera versión del hoy irremediablemente popular Windows, pensé que Steve Jobs se habría aprendido la lección sobre invitar a presidentes de otras compañías a jugar al patio de su casa. 
Sin embargo y por razones que no alcanzo a comprender Eric Schmidt el mismísimo CEO de el imperio Google pasó a formar parte de la cúpula directiva de Apple en 2006, lo que sin duda le suministró un importante caudal de información privilegiada de la empresa. No hace falta decir que en esos momentos Apple se encontraba desarrollando lo que ha sido la última revolución de la telefonía móvil, el mismísimo iPhone. Podría ser casualidad pero cualquiera diría que Android es una versión Linux de iPhone. Android hace todo lo que hace el iPhone, está abierto a los desarrolladores, tiene muy buen aspecto visual, es adaptable a cualquier teléfono móvil y operador y encima es absolutamente abierto.De nuevo se repite la historia. Apple seguirá con sus estúpidos y abusivos contratos, con su ideología cerrada y sus precios arbitrarios y Google con esa filosofía tan cool regalará su plataforma a los fabricantes de teléfonos móviles y la abrirá a todos nosotros para que la mejoremos cuanto queramos. ¿Resultado? En 3 o 4 años todos usando Android más felices que las pascuas, dando así a google aún más poder. ¿Y que pasará con el iPhone? Ah si, el aparatito ese que inventaron en 2007 que fué el precursor del sistema operativo móvil que todos usamos en la actualidad.
Gracias Apple por inventar la tecnología del futuro, y Google por hacernosla llegar más barata.
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